Tribuna
El caso de Florence Cassez ha sido usado con fines electorales por el Gobierno de Felipe Calderón, mientras que la decisión de Nicolas Sarkozy de dedicar el Año de México en Francia a la presunta secuestradora denota falta de tacto, denunció ayer el diario Le Monde.
“El juego mexicano es peligroso. Indiferente al expediente jurídico, el partido del señor Calderón manipula el asunto Cassez con fines electorales. Aprovecha la fibra nacionalista, sensible en México. Utiliza el asunto para adular el orgullo nacional. Sin embargo, ¿tiene por ello razón el señor Sarkozy de transformar un asunto particular en un asunto de Estado?”, cuestionó Le Monde en un editorial titulado “Florence Cassez, prisionera de la razón de Estado”.
“Al dedicar esta manifestación (el Año de México en Francia) a la señora Cassez, el señor Sarkozy no podía ignorar que provocaría el retiro de México. La cuestión es saber si la actitud de Francia favorece la causa de la señora Cassez”, preguntó el diario.
El influyente medio fustigó la manera en la que el Presidente Nicolas Sarkozy ha manejado el caso Cassez criticando incluso algunos rasgos de su personalidad.
“En este asunto, el señor Sarkozy es fiel a su manera de ser. Presenta una empatía hacia la prisionera. Muestra públicamente sus sentimientos. Toma la opinión pública como testigo. Es más justiciero que diplomático”.
El vespertino galo también consideró que este asunto “ha tomado un matiz más político que jurídico” lo que observa una falta de tacto por parte de Francia.
“Inmensas zonas opacas se ciernen sobre este asunto que ha tomado un giro más político que jurídico. Francia se preocupó por ello. En visita oficial en México en marzo de 2009, Nicolas Sarkozy abogó por una medida de clemencia ante su homólogo mexicano, Felipe Calderón. Sin el menor éxito”.
Además de criticar a Sarkozy, el influyente diario también denunció que México no se comportó como un país amigo de Francia. “Se puede entender el enojo de Francia contra México. Entre países que se pretenden amigos hay cosas que no se hacen o más bien gestos que se pueden esperar. El asunto Florence Cassez que provoca una crisis grave entre Francia y México es un buen ejemplo de ello. “En vísperas de inaugurar el Año de México en Francia, a principios de febrero, Paris contaba con que México hiciera un gesto. Los franceses solicitaban la transferencia de Florence Cassez. Un medida común entre países ‘amigos’ que habría permitido a la señora Cassez purgar su pena en Francia. Nuevo rechazo mexicano”, dice Le Monde.
Además de Le Monde, algunos sectores políticos también han criticado el proceder de Sarkozy en este caso. “La diplomacia no se maneja ante los micrófonos y las cámaras. Espero que Florence Cassez no va pagar los errores cometidos en términos de comunicación política”, dijo el socialista Claude Bartolone.
Christian Vanneste, diputado del UMP, partido de Sarkozy pero cercano de su rival Dominique de Villepin, evocó la invasión francesa del siglo 19 para criticar lo que consideró como la arrogancia francesa.
“El respeto que se debe al legítimo orgullo mexicano, al mismo tiempo que la prudencia necesaria para obtener resultados cedieron ante una arrogancia nacional que México ya probó en la época de Napoleón III”, dijo.
Descartan tratar caso Cassez en G-20
El Comisario Europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, descartó que la reunión ministerial del G-20, prevista para este fin de semana en París, sea el foro para tratar temas bilaterales como el de Florence Cassez, tal y como ha sugerido Francia.
“Es un asunto entre México y Francia”, declaró Rehn en conferencia de prensa en presencia del presidente del Consejo de Asuntos Económicos y Financieros de la Unión Europea (Ecofin), el Ministro húngaro de Finanzas, György Matolcsy.
Rehn recordó que el G-20 es un foro multilateral cuyos trabajos se centran en la agenda de la economía mundial.
“Sabemos que el G-20 se centra fundamentalmente en la economía mundial y en las relaciones económicas. Se trata de un foro multilateral y tanto Francia como México están contribuyendo a reequilibrar el crecimiento mundial, estableciendo condiciones equitativas en todo el mundo”.
La Ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, dijo ayer que su país aprovechará la reunión del G-20 para tratar el tema de la francesa Florence Cassez, encarcelada en México por secuestro.
Aseguró que la reunión de trabajo sobre el sistema monetario internacional representaba una clara ocasión para poder evocar este asunto con sus homólogos.
Francia ostenta este año la presidencia del G-20, que reúne a las economías más desarrolladas y a las potencias emergentes. La presidencia del grupo pasará a México en 2012.
El Mandatario galo, Nicolas Sarkozy, había propuesto al Presidente mexicano, Felipe Calderón, participar en el grupo de trabajo sobre la reforma del sistema monetario internacional, uno de los objetivos trazados para este año.
Los tribunales condenaron a Cassez a 60 años de prisión. Para el Gobierno francés, el proceso se desarrolló en condiciones sospechosas, mientras las autoridades mexicanas aseguran que fue apegado a derecho.
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